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¿Cómo cuidar de un gato convaleciente tras una operación?

¿Cómo cuidar de un gato convaleciente?

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Si tu gato acaba de someterse a una intervención quirúrgica, es probable que esté un poco cansado por la experiencia vivida y los efectos de la anestesia. Por tu parte, puedes procurar que el proceso de recuperación sea lo más cómodo posible. Para ello, puedes seguir algunas indicaciones para su cuidado en casa.

Tu veterinario te aconsejará sobre el periodo que transcurre tras la operación de tu gato, sobre su estado, lo que habrá que controlar, así como sobre los medicamentos postoperatorios. Asegúrate de seguir las instrucciones, y si tienes cualquier pregunta, no dudes en pedir consejo al veterinario.

En general, los gatos están un poco adormilados tras la anestesia, pero, en principio, pueden comer perfectamente sin síntomas de dolor. La recuperación total puede llevar algún tiempo; si notas que algo anda mal, acude al veterinario de inmediato.

Heridas/Puntos

Si tu gato ha necesitado puntos, debes vigilarle de cerca. Algunas suturas se practican debajo de la piel, pero informa a tu veterinario de cualquier rojez, hinchazón, secreción o pérdida de sangre. 

Los puntos se suelen retirar al cabo de unos 10 días, aunque este plazo de tiempo depende del tipo de operación y de la zona del cuerpo del animal donde se encuentre la sutura. Los puntos internos quedan ocultos debajo de la piel y son de un material reabsorbible, pero puede que el veterinario quiera que le lleves el gato para realizar un seguimiento y comprobar que el proceso de curación siga su curso normal.

Apósitos

Los apósitos pueden resultarle molestos. Es muy importante conservar los apósitos secos para que no dañen la piel. Los gatos con apósitos no deberían salir de casa porque pueden arrancarse, mojar o ensuciar el apósito. 

Presta mucha atención a los olores desagradables, a los cambios de color y a las hinchazones que pueden producirse encima o debajo de los apósitos, así como a los signos de cojera o dolor, y acude al veterinario si hay algo que te inquiete.

Collar Isabelino

Se trata de un collar o campana por lo general de plástico y en forma de embudo. Pero también los hay de otros tejidos más suaves que pueden ser más cómodos para tu gato. Mantén el collar limpio y elimina cualquier resto de comida que haya caído dentro al comer.

Los collares están diseñados para evitar que tu gato se lama, rasque o muerda las heridas, así como para que no muerda el apósito. Lo tiene que llevar en todo momento, sobre todo durante la noche que es cuando está solo. Los gatos se adaptan rápidamente a llevarlo, pero puede que le impida comer y beber; si es así, quítaselo para que coma.

Si tu gato está muy estresado por el collar, comunícaselo al veterinario por si quiere buscar una alternativa.

Alimentación

Al igual que en los seres humanos, los gatos pueden sufrir nauseas al despertarse después de la anestesia, por lo que debes tratarlo con cuidado después de la operación. Una vez en casa, dale a tu gato una comida ligera. Dale una dieta muy digerible que te haya recomendado el veterinario o simplemente una cuarta parte de su alimentación habitual. Asegúrate de que tenga mucha agua fresca, y que tanto los cuencos de la comida como del agua estén cerca del gato para que no tenga que caminar demasiado para comer o beber.

Ejercicio

Es muy importante que el gato descanse para recuperarse, incluso los gatos más activos. Intenta mantener a tu gato el mayor tiempo posible en el interior de la casa hasta que hayan desaparecido los puntos o haya transcurrido el tiempo indicado por el veterinario. No es el momento de hacer esfuerzos físicos, ya que cualquier actividad física excesiva puede conllevar complicaciones. Procura que el gato esté tranquilo. Pregunta al veterinario cómo puedes evitar que el gato suba escaleras o salte a los muebles; quizás sea más fácil que lo tengas encerrado en una habitación.

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