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Perro tumbado sobre una manta festiva con un árbol de Navidad al fondo.

Navidades seguras para perros

7 min de lectura

La Navidad es, generalmente, un periodo de alegría y diversión para toda la familia, incluido tu perro, claro. Pero, por desgracia, en estos días hay muchos peligros potenciales y factores estresantes para tu perro. Si quieres asegurarte de que tu perro esté feliz y seguro esta Navidad, lee nuestra guía.

El periodo navideño es un momento de gran diversión para toda la familia y también debería serlo para tu perro. A los perros también les encanta celebrar las fiestas con nosotros y pasan todo el tiempo haciendo travesuras, como robar tus golosinas navideñas o tirar el árbol y, aunque todo esto puede parecer muy divertido, la temporada festiva también puede conllevar un montón de peligros potenciales a los que tendrás que estar atento.

Con la Navidad en camino, es posible que te preguntes cómo asegurarte de que la Navidad de tu perro sea tan feliz como la tuya, por eso hemos creado esta guía para mantener a tu perro seguro y feliz en estas fiestas.

Perros y árboles de Navidad

Como sabes, una de las principales tradiciones navideñas consiste en poner un árbol en casa, y para tu perro, esto es un sueño hecho realidad. Tu perro mirará el árbol y sus ojos se iluminarán al pensar en la cantidad de ramitas para morder y, si tienes un perro macho, es posible que lo vea como un excelente lugar nuevo para orinar. Algunos dueños de mascotas tendrán la suerte de tener un cachorro que no haya optado por esta forma de diversión, pero si tienes un perro que no puede resistirse, necesitarás un árbol de Navidad a prueba de perros. Esto es con lo que debes tener cuidado.

Lucecitas

Uno de las cosas más peligrosas para los perros de los árboles de Navidad son las luces parpadeantes que los envuelven. Pueden parecer inofensivas, pero algunos perros piensan que los cables son juguetes nuevos y brillantes para morder. Además, si tienes un cachorro particularmente bullicioso al que le gusta jugar con cualquier cosa, es posible que además se enrede en los cables.

Una manera fácil de evitar que tu perro se haga daño con las luces del árbol de Navidad es atar los cables sueltos y desconectarlos siempre de la red eléctrica cuando no estés. Si quieres dejar las luces encendidas todo el tiempo, opta por las que funcionan con pilas y asegúrate de dejar las pilas en un lugar que tu perro no pueda alcanzar.

Decoraciones y adornos colgantes

Otra forma de hacer que los árboles de Navidad sean a prueba de perros, es asegurarte de comprar solo decoraciones seguras. Evita caramelos o cosas de materiales que tengan olor a comida en tu árbol, ya que además de correr el riesgo de que tumbe el árbol para comérselas, pueden causarle un problema serio en el estómago. Las bolas de cristal también son una mala idea si tienes un perro bullicioso, ya que pueden romperse y dañar a tu mascota. En su lugar, opta por decoraciones de plástico no tóxico.

Si tienes adornos más caros que tienen que ir sí o sí en el árbol, colócalos lo más arriba posible donde el perro y su cola no puedan alcanzarlos. Además, no pongas decoraciones comestibles, chocolates o bastones de caramelo en el árbol, ya que son muy tóxicos para los perros y muchos no podrán resistirse.

Tirar el árbol de Navidad

Si a tu perro le encanta jugar con tu árbol, probablemente necesites una solución para evitar que lo tire en medio de tu sala de estar. La mejor manera de hacerlo es comprar una base con peso o poner contrapesos en la parte inferior para mantenerlo en su lugar de manera segura. Alternativamente, si deseas mayor seguridad aún, puedes anclarlo al techo o pared.

Regalos bajo el árbol

Un árbol de Navidad rodeado de regalos envueltos en papeles de colores y con lazos puede ser una maravillosa vista y puede también resultar una tentación demasiado grande para tu perro. Mantén los regalos fuera de la vista de tu perro si no hay alguien cerca, luego asegúrate siempre de que tu perro esté supervisado; de lo contrario, podrías encontrarte con que ha decidido cuál era el mejor momento de abrirlos todos. Nunca coloques los regalos de Navidad de tu perro debajo del árbol, sabrá que son para él por el olor o sonido y lo que sucederá te lo puedes imaginar.

¿Los árboles de Navidad son venenosos para los perros?

Sí, algunos abetos producen aceites que son levemente tóxicos y, si se ingieren, podrían hacer que tu perro vomite o babee en exceso. Además, las puntas afiladas de los árboles son un motivo adicional de preocupación, ya que existe un riesgo leve de que, si se ingieren, las agujas puedan causar daños internos. Sin embargo, es raro que un perro se coma tanta cantidad del árbol como para que le cause algún problema.

Si quieres tener un árbol de Navidad de verdad, es mejor optar por una variedad a la que no se caigan las agujas, porque estas pueden clavarse en las patas de tu perro, lo que puede ser muy doloroso. Además, debido a la leve toxicidad de algunos árboles de Navidad, es mejor colocarlo en una habitación separada de la casa a la que tu perro no pueda acceder cuando no esté supervisado.

Alimentos navideños

Hay muchos alimentos navideños que son venenosos o tóxicos para tu perro, especialmente chocolates, uvas, sultanas y otras variedades de pasas. Muchos dueños de perros piensan que darles un poco de pollo o pavo es un buen regalo, pero estas sobras pueden contener pequeños huesos que son peligrosos; siempre revisa bien la carne antes de dársela a tu perro. Si quieres darle a tu perro una cena de Navidad, lee nuestro artículo para obtener información sobre lo que puedes y no puedes incluir.

Plantas navideñas

Las plantas y flores navideñas quedan preciosas en casa, pero por desgracia muchas de estas plantas son tóxicas para los perros. La flor de Pascua, que se usa en muchas guirnaldas y arreglos, puede causar irritación estomacal y bucal, mientras que las bayas de acebo y muérdago europeo también son tóxicas y pueden causar malestar estomacal. El muérdago americano, por otro lado, es altamente venenoso. Además, la hiedra, que se usa en guirnaldas, puede causar enfermedades e irritación de la piel como dermatitis de contacto.

Petardos

Los petardos son otro elemento básico de las reuniones festivas, pero estos sonidos fuertes pueden asustar mucho a tu perro.

Si los vas a lanzar, es una buena idea poner al perro en otra habitación o en el jardín. Además, te cuidado con los pequeños trocitos de petardos que salen volando, pueden terminar en el suelo donde tu perro puede comérselos.

Visitas de amigos y familiares

Es probable que tengas muchos amigos y familiares que te visiten durante las fiestas y esto puede ser bastante abrumador para tu perro, especialmente si no está acostumbrado. Asegúrate de proporcionarle un espacio alejado de todo con mantas y comida y agua. De esa manera, si se siente estresado por todo el jaleo que hay en casa, puede ir a su rincón de paz.

¿Cómo evitar que tu perro muerda a los invitados en Navidad?

La Navidad, o cualquier otra fiesta de invierno con luces y alegría, es una época mágica para todos. Amigos y familiares se reúnen para compartir comida, vino (a menudo demasiado) e intercambiar regalos. Los niños están emocionados y muy nerviosos, los adultos a menudo están muy ocupados tratando de hacer que todo sea perfecto para la familia, y la casa está llena de extraños que comen, beben, cantan y están muy alegres.

A pesar de toda esta diversión y disfrute, esta es la época del año en la que más se dan las mordeduras de perros en el hogar y, en la mayoría de estos casos, las víctimas son niños pequeños. 

¿Por qué las mordeduras de perros ocurren con más frecuencia en Navidad?

Si lo pensamos un poco, no es difícil ver por qué y, afortunadamente, sabiéndolo es fácil prevenir y asegurarse de que todos tengan una feliz Navidad.

En primer lugar, hay muchos niños o los mismos, pero estos días se mueven mucho más porque están especialmente nerviosos por los regalos (y porque comen más azúcar que en todo el resto del año junto). Se acerca la Navidad.

El hogar que para tu perro es su lugar donde estar tranquilo se ha convertido en una jaula de grillos. Hay cosas por todas partes, luces, papeles, lazos, y encima alguien ha traído un árbol que, a diferencia de cualquier otro árbol, tiene prohibido tocarlo, morderlo y orinar en él porque siempre que lo intenta escucha un tajante ¡no, no!

Hay visitas inesperadas en la casa y, si para los niños es un tostón que les digan que den las gracias y un beso a sus cuatrocientos tíos, para los perros es una pesadilla porque encima no pueden comer turrón ni tienen regalos. 

Y, para colmo, el clima no es bueno, por lo que es probable que el perro esté haciendo menos ejercicio físico de lo habitual. Además, esos días vamos todos de un lado para otro tratando de tenerlo todo controlado y dedicamos menos tiempo que en otros momentos a nuestro perro. 

La mayoría de los perros bien socializados pueden hacer frente a la locura temporal de la Navidad, y muchos la disfrutan, pero para un número sorprendentemente grande es estresante y preocupante. A los perros les gusta la rutina y que todo sea previsible, pero en el escenario de en estas fiestas el perro está poco ejercitado, sobre estimulado y poco supervisado. Cuidado con los accidentes

¿Cómo evitar que el perro muerda?

1. Recuerda que las necesidades de tu perro no paran durante la temporada festiva.

Asegúrate de que haga suficiente ejercicio, tenga estimulación y toda tu atención, como en cualquier otra época del año, sin importar lo ocupado que estés. Es tu perro todos los días del año y a todas horas, y esto incluye Navidad

2. Trata de mantener la rutina de tu perro como siempre.

Es más fácil para un perro lidiar con lo inesperado si tiene una rutina clara y sabe qué hará el resto del tiempo.

3. Supervisa todas las interacciones entre niños y perros.

Esto se aplica tanto a tus propios hijos como a los extraños. Si no puedes, usa puertas para bebés para mantenerlos separados, o simplemente mantén al perro contigo. Asegúrate de saber dónde está todo el mundo, ¡todo bajo control!

4. Estate atento a cualquier señal de que tu perro pueda estar estresado.

Los perros no pueden decirte cuándo empiezan a hartarse o a sentirse ansiosos, por lo que debes estar atento a esas señales reveladoras del lenguaje corporal. Estos pueden ser signos sutiles, como lamerse o bostezar, o pueden ser signos más obvios, como tensión, apariencia preocupada, lenguaje corporal reducido o intentos de esconderse o simplemente alejarse del caos. 

5. No permitas que nadie, niño o adulto, toque a tu perro bruscamente o de manera inapropiada.

Nada de agarrar, abrazar o juegos bruscos. Esto es especialmente importante cuando hay alcohol de por medio, ya que las personas borrachas se comportan de forma muy impredecible, desde el punto de vista de un perro. Además, cuando empieza el baile y el "ponme otra copita", el perro se puede llevar un pisotón o un buen susto y reaccionar de forma impredecible.

6. Ten un 'espacio seguro' para tu perro donde pueda ir y no ser molestado.

Usa este espacio cada vez que las cosas se empiecen a poner caóticas, ruidosas, o simplemente cuando tú no puedas supervisar a tu perro, y asegúrate de que el perro tenga un lugar cómodo para que sienta especial y no castigado y encerrado lejos de la diversión.

Sin embargo, quizás lo más importante que puedes hacer es asegurarte de tener algo de «tiempo para el perro» todos los días. Tiempo en el que te olvides de la locura de las fiestas y te centres totalmente en tu perro, asegurándote de darle lo que necesita para estar sano y feliz. Este es el mejor regalo de Navidad que le puedes dar a tu perro: tu tiempo y tu amor.

Nota: si te preocupa que tu perro pueda comportarse de manera agresiva con los miembros de la familia o los visitantes, consulta a un conductista cualificado y con experiencia para obtener ayuda.

Esa es nuestra guía para asegurarte de que la Navidad de tu perro sea segura y feliz. ¿Tienes un gato también? Lee a continuación nuestro artículo sobre unas navidades seguras para tu gato.