El braco húngaro de pelo duro es una raza relativamente sana, con pocos problemas de salud conocidos.
- Perro apto para dueños con algo de experiencia
- Se requiere algo de adiestramiento
- Le gustan los paseos enérgicos
- Le gusta pasear más de dos horas al día
- Perro grande
- Babeo mínimo
- Requiere aseo una vez por semana
- Raza no hipoalergénica
- Perro tranquilo
- No es un perro guardián
- Puede necesitar entrenamiento para vivir con otras mascotas
- Perro familiar
Personalidad
Al braco húngaro le encanta al aire libre y se adapta especialmente bien a una familia que viva en el campo. Es muy cariñoso y fiel y se muestra protector con su familia Le encanta ser perro de familia y de trabajo a la vez. Aprende muy rápidamente y le gusta complacer, pero es muy sensible, por lo que es importante que el adiestramiento sea divertido y apacible.
Origen
Hay pinturas de hace 1000 años que muestran a cazadores magiares, los primeros pobladores de Hungría, con perros y halcones. Estos perros se parecían mucho al braco húngaro actual. Cuando los magiares se desplazaron a otros países se llevaron a los perros consigo, lo que dio lugar a cruces con otras razas, aunque esta raza estuvo a punto de extinguirse durante las dos guerras mundiales. Consiguió sobrevivir hasta nuestros días gracias al contrabando de ejemplares durante aquella época. La cría selectiva reciente ha desarrollado a un braco húngaro de rastreo, señalización y recobro. La variedad de pelo duro se creó en la década de 1930 y se popularizó rápidamente entre los cazadores, ya que podía resistir el agua fría y las inclemencias del tiempo mejor que la variedad de pelo corto.
¿Sabías que...?
El braco húngaro de pelo duro es conocido porque, en un principio, se empleó para ayudar en la caza con halcón, se dice que aún posee una afinidad natural con las aves de presa.