Uno de los problemas más comunes que sufre el cocker spaniel americano son las continuas infecciones de oído, debido a las grandes orejas que tiene. Como ocurre con muchas otras razas, puede padecer desplazamientos temporales de la rótula (luxaciones de rótula), diversos trastornos oculares hereditarios y displasia de la cadera (una enfermedad que puede dar lugar a problemas de movilidad). Por tanto, es importante un examen de la cadera y de los ojos antes de dedicar al perro a la crianza.
- Perro apto para dueños sin experiencia
- Se requiere algo de adiestramiento
- Le gustan los paseos enérgicos
- Le gusta pasear más de dos horas al día
- Perro mediano
- Babeo mínimo
- Requiere aseo cada dos días
- Raza no hipoalergénica
- Perro expresivo y ladrador
- No es un perro guardián
- Puede necesitar entrenamiento para vivir con otras mascotas
- Perro familiar
Personalidad
Alegre es un adjetivo que se suele emplear para describir esta raza. En general, es afable, confiado y alegre. Se recomienda una socialización temprana y completa para que no se vuelva tímido o temeroso de los desconocidos o las cosas nuevas. Puede que no sea tan grande como muchos perros de caza, pero a este perro inteligente le gusta estar ocupado y le encanta jugar y pasar el rato con su familia. No le hace mucha gracia que lo dejen solo durante mucho tiempo.
Origen
Se dice que el primer cocker spaniel llegó a Estados Unidos con los llamados Padres Peregrinos en el Mayflower en 1620. Los colonos en los siglos posteriores trajeron más consigo para que los ayudaran a explorar y explotar aquellos territorios silvestres del país. Los cocker americanos se crearon a partir del cocker inglés en el siglo XIX para cazar codornices y perdices. Aún conservan algunos de sus instintos cazadores, pero la mayoría se encuentran ahora en exhibiciones o como mascotas.