Hasta la fecha, hemos realizado unos avances considerables para garantizar solo el uso de la cantidad mínima adecuada de embalaje para envasar nuestros productos de una manera segura. En 2016, como parte de nuestros Compromisos de Purina en la Sociedad, nos fijamos el objetivo de evitar el uso de 3.000 toneladas de material de embalaje para 2019, en comparación con los niveles de 2015. En 2018, evitamos 787 toneladas de embalaje. En total, desde 2015 hemos evitado 3.542 toneladas de embalaje. Hemos superado este objetivo en un 18%. El 52% del material de embalaje que se ha evitado desde 2017 era plástico.
Un buen ejemplo de nuestras iniciativas para disminuir el uso de plástico es la reducción del peso de algunos de nuestros envases al reducir la capa de PE (polietileno). Este cambio en los envases ya se ha implementado en nuestras fábricas europeas y ha logrado un impacto positivo en la reducción general del embalaje, lo que nos permite reducir un total de 528,3 toneladas de envases.
Sin embargo, nuestros esfuerzos para reducir el uso de plásticos en nuestros envases no acaban ahí. Estamos trabajando para eliminar o cambiar las combinaciones más complejas de materiales de envasado para que todos nuestros envases, incluidos los plásticos, sean reciclables. También estamos trabajando para incorporar, cuando sea posible, plásticos reciclados en nuestros envases e invertir en investigación para encontrar materiales sostenibles que protejan la comida para mascotas de la misma manera que lo hacen los plásticos.
También colaboramos con distintas entidades para desarrollar nuevos enfoques que fomenten el aumento del reciclaje, ya que sabemos que el compromiso de un envasado 100% reciclable o reutilizable por sí solo no basta para abordar el problema de los plásticos.
Descubre el compromiso de Purina para mejorar la eficacia medioambiental de nuestro embalaje.