El braco húngaro suele ser una raza de buena salud. Los problemas específicos más habituales de esta raza son un trastorno de la deglución y la epilepsia.
- Perro apto para dueños con algo de experiencia
- Se requiere algo de adiestramiento
- Le gustan los paseos enérgicos
- Le gusta pasear más de dos horas al día
- Perro grande
- Babeo mínimo
- Requiere aseo una vez por semana
- Raza no hipoalergénica
- Perro tranquilo
- No es un perro guardián
- Puede necesitar entrenamiento para vivir con otras mascotas
- Puede necesitar entrenamiento para vivir con niños
Personalidad
De carácter inigualable, el braco húngaro es un compañero divertido, alegre y cariñoso para aquellos que pueden dedicarle el tiempo y la atención que necesita. Es un perro sensible que disfruta con la actividad, aprendiendo cosas nuevas y con el adiestramiento, siempre y cuando sea divertido y gratificante. Es protector con sus seres queridos por naturaleza.
Origen
El braco es una raza de larga tradición que se remonta varios siglos. Se han encontrado tallas de piedra en los Cárpatos, de aproximadamente 1000 años de antigüedad, que representan a un magiar nómada cazando con un halcón y un perro muy parecido al braco húngaro. Después de las dos guerras mundiales, la raza estuvo a punto de desaparecer, pero algunos criadores especializados lograron recuperarla con perros que sacaron a escondidas de Hungría. En la actualidad, no solo es un perro popular para el rastreo, señalización y recobro (HPR o hunt, point and retrieve en inglés), sino también un compañero muy apreciado.